martes, diciembre 11, 2007

Zona (a)típica de Los Andes; un ejercicio de planificación Urbana.

Introducción
La zona típica de Los Andes es un área de protección arquitectónica del plano damero; es decir, su función es conservar la "estética" del centro de Los Andes. El tema está en la palestra en los círculos administrativos y empresariales de la ciudad; definíendose dos claros bandos; los que están a favor de la denominación y los que están en contra. Este tema es muy complejo y dificil de abordar, sin embargo trataré de dejar claro mi posición a tal (aberración) denominación.
Conceptos
Para abordar el tema definiremos algunos conceptos:

Zona Típica: (...) Que las Zonas Típicas o Pintorescas, según se desprende de las disposiciones de la Ley Nº17.288, constituyen agrupaciones de bienes inmuebles urbanos o rurales, que forman una unidad de asentamiento representativo de la evolución de una comunidad humana y que destacan por su unidad estilística, su materialidad o técnicas constructivas; que tienen interés artístico, arquitectónico, urbanístico y social, constituyendo áreas vinculadas por las edificaciones y el paisaje que las enmarca, destaca y relaciona, conformando una unidad paisajística, con características ambientales propias, que definen y otorgan identidad, referencia histórica y urbana en una localidad, poblado o ciudad. fuente: CMN

Intervención: Proceso que implica la ejecución de obras de construcción, conservación, reciclaje o ampliación de las edificaciones existentes y su entorno. link

Conservación: El conjunto de procesos necesarios para la mantención de la importancia arquitectónica, arqueológica, histórica, artística, científica, paisajística, biológica y social del patrimonio cultural o natural. Este proceso de conservación implica acciones de preservación, restauración y reconstrucción. link

Preservación: El proceso de mantener el estado original de un inmueble, sitio o ambiente, ya sea protegiéndolo anticipadamente del daño o peligro, o retardando su deterioro con el mínimo de intervención. link
(Definiciones en el marco de "Zona Típica, Consejo de Monumentos Nacionales).
El en marco de la Ley 17.288, TITULO VI, artículos 29 y 30 en su totalidad designa lo siguiente:
Artículo 29º.- Para el efecto de mantener el carácter ambiental y propio de ciertas poblaciones o lugares donde existieren ruinas arqueológicas, o ruinas y edificios declarados Monumentos Históricos, el Consejo de Monumentos Nacionales podrá solicitar se declare de interés público la protección y conservación del aspecto típico y pintoresco de dichas poblaciones o lugares o de determinadas zonas de ellas.

Artículo 30º.- La declaración que previene el artículo anterior se hará por medio de decreto y sus efectos serán los siguientes:

1.- Para hacer construcciones nuevas en una zona declarada típica o pintoresca, o para ejecutar obras de reconstrucción o de mera conservación, se requerirá la autorización previa del Consejo de Monumentos Nacionales, la que sólo se concederá cuando la obra guarde relación con el estilo arquitectónico general de dicha zona, de acuerdo a los proyectos presentados.
2.- En las zonas declaradas típicas o pintorescas se sujetarán al Reglamento de esta ley los anuncios, avisos o carteles, los estacionamientos de automóviles y expendio de gasolina y lubricantes, los hilos telegráficos o telefónicos y, en general, las instalaciones eléctricas, los quioscos, postes, locales o cualesquiera otras construcciones, ya sean permanentes o provisionales.
Armando el rompecabeza.
Si bien no cuento con el documento técnico sobre la ZT de Los Andes que hace mención la Ley 17.288, un recorrido por el centro de la ciudad, puedes obtener los primeros indicios de por qué se cuestiona la denominación.
- Por lo general, los inmuebles en las zonas periféricas del plano damero, predomina construcciones de un piso; familiares con un comercio básico (almacenes de barrio), en contraste con industrias alimentarias (alimentos INDAL) , estaciones de servicio y Supermercados.
- En el centro se ubican edificios históricos de gran interés patrimonial, como son la gobernación de Los Andes (MN), La capilla Santa Rosa, la "casa colorada", y otros edificios de estilos llamativos, contrastando con inmuebles destinados a comercio de reciente data y aberraciones como el "bloque" de cemento que pertenece a Mega johnson's.
- La densidad poblacional no es homogénea, ya que se concentran en "islas" como los edificios de departamentos cercanos a la Plaza de Armas y en la periferia en la Av. Independencia.
- Los estilos de las casas hacen notar que las construcciones en promedio tienen unos 50 años y son de múltiples estilos (las viviendas) y los edificios unos 15 años en general, o sea no hay un patrón en general como se puede encontrar en las Ciudades de La Serena o en Valparaíso.
- Existen Zonas deterioradas y terrenos eriazos; como el terreno que colinda a la Iglesia Santa Rosa; la cuadra entre Av. Chacabuco, Membrillar, Freire y Rancagua; Papudo al llegar a la Av. Argentina y el ex-terminal de buses de Los Andes y su entorno.
- No existe (o no lo encuentro) algún lugar que pueda identificar como barrio; se acerca a la definición el distrito comercial del centro.
Por otra parte; Los Andes se encuentra en el momento en que debe definir que ciudad ser. En los próximos años, vivirá un desarrollo vertiginoso con la expansión de la mina de Cobre Andina; el pleno funcionamiento del Puerto Terrestre, la re-apertura del tren Trasandino, entre otras actividades; notándose en la cantidad de la demanda por inmuebles y lugares para construir.
En otro ámbito (armando el rompecabezas) nos encontramos con la definición de Patrimonio. si bien no es nombrado, es un concepto tangencial y subyacente a cualquier declaratoria bajo los parámetros del Consejo de Monumentos. En la defensa del patrimonio Andino, la zona típica es "ineludible" a cualquier atisbo de intervención en el centro de Los Andes.
Decantando la Idea.
Lo "patrimonial" es la pertenencia social de "algo" que trasgrede cualquier valor mundano. El sentimiento de pertenencia por parte de los andinos por "algo" se ve reflejado en cómo nos ven el resto del planeta, hacemos propio "iconos" que nos identifican...si usted pregunta a algún andino algo sobre su ciudad; ten claro que la respuesta van a ser; guatón loyola, el rodeo, campo, Santa Teresita, Cordillera, el Cerro de la virgen...y esperarás sentado para que te nombre el centro de Los Andes (o la zona típica)...haz la misma pregunta a un Serenense...
Entonces, la denominación de la zona típica se transforma en un instrumento de planificación territorial ( en el caso de Los Andes, urbana) desde el estado, destinado a proteger áreas de interés arquitectónico, traslapando en funciones al "plano regulador" y a las directrices del PLADECO.
¿Y si se estipula en el PLADECO, que para el desarrollo imperioso de Los Andes, es necesario densificar el centro?, lamentablemente no se puede porque se debe consultar al Consejo de monumentos. ¿y por qué debemos consultar a un organismo nacional sobre el destino de nuestra ciudad? porque está estipulado por ley.
Siendo muy crítico de tal desición; creánme que todavia no he encontrado razones de peso para la ZT. He escuchado desde que el centro de Los Andes es el "Machu Pichu" Aconcaguino, hasta que el plano damero es único en el país porque cuenta con una plaza de tres niveles... (¿?). El estilo Aquitectónico de las construcciones de la zona típica es tan armonioso como un cuadrado hecho por un niño de kindergarden. es decir, no existe una homogeneidad en la zona típica...y si no hay ¿Cuáles son las verdaderas razones de la designación? ¿Acaso un arquitecto que contrajo "patrimonitis", contagió a las autoridades de esa época?¿Las autoridades contagiaron al resto?¿Es un berrinche intelectual sin medir las consecuencias?, ¿Es necesario establecer un área de amortización para los Monumentos Nacionales?.
Lo que uno ve cuando va a Los Andes es una configuración "estéticamente no armoniosa"de su centro, contrastado con las innumerables villas que la rodean, con casas iguales, calles iguales como la homogeneidad post-industrial, Después de la WWII.
El verdadero peligro que atenta al patrimonio Andino está, paradógicamente alrededor de la ciudad. Parcelas y haciendas añosas y fértiles van dando paso a casas baratas como fichas de dominó en un orden simétrico, casi enfermante. el paisaje cambia y la ciudad se amplía hacia los terrenos antes cultivados, sin tomar en cuenta que en el centro se puede reciclar sitios, hablilitándolos para viviendas. el río Aconcagua, en el norte de la ciudad aparece como un ente lejano, siendo un mero expectador cotidiano de la Ciudad; como el Cerro la Virgen.(que colinda con el centro histórico de Los Andes).
En resumen...
Después de tener una hemorrágea de ideas (lluvia de ideas), quiero definir mi postura con respecto a la ZT.
En patrimonio, es importante contar con "iconos" que representen y den características de un lugar. Los monumentos Históricos son importantes para generar esa imagen y de eso nos debemos preocupar todos los andinos.
El patrimonio, por lo tanto, la definen Los Andinos.
La zona típica de Los Andes cumplió 7 años...y lo más destacable es la demora en la entrega del Cine del ex- hotel continental. (se conservó la fachada, como el Jumbo de Valparaíso, ex Gas Valpo)
La zona típica no tiene razón de ser; lo único de valor histórico (además de edificios de categoría MN) es el plano damero (que tienen todas las ciudades fundadas por españoles durante la colonia), las demás construcciones sólo tienen un valor de mercado.
La Zona típica como área de protección arquitectónica e histórica carece de argumentos de peso.
Recomendaciones
No trato de demoler todo el centro, pero es preciso acotar la planificación urbana de la ciudad acoger la idea de densificar el centro de forma sustentable, no se trata de crear un "manhattan" aconcagüino, sino que en zonas del centro se permita la construcción para viviendas, sean estas departamentos o construcciones mixtas, para no caer en la tentación de construir en áreas agrícolas que en futuro nos pesarán en nuestras conciencias.
densificar la costanera sur del río Aconcagua es una buena alternativa a la hora de construir espacios de vivienda. Así Los Andes ganará un hermoso entorno natural y un espacio cerca del centro.

La Profesión de Geógrafos en Chile.

Todos los Geógrafos hemos pasado por las siguientes expresiones:

- mmm...Geógrafo...mmm, bueno...eres profesor de historia y geografía; haber, ¿Cuál es la capital de Bolivia? (una respuesta que ni siquiera los Bolivianos saben).
- ¡ha! Geógrafo, ¡tu buscas rocas en los cerros!.
- ¿Geografía? ...¿Eso se estudia en la universidad?.
- ¿Qué hacen los geógrafos?, ¿Dibujan mapas?.
- ¿Para qué sirve la geografía?

Más de alguna vez hemos (los geógrafos) empleado un tiempo considerable en explicar que diablos hacemos. Es increible que la mayoría enfaticemos nuestro carácter polifacético, tan útil como una impresora multifuncional, pero, la verdad es que es dificil definir a ciencia cierta que hacemos. Nuestra formación Holística (adaptada y sintetizada desde las ciencias sociales) con capacidades pseudo-técnicas, nos permitiría dominar en un escenario eventual, como una de las nuevas diciplinas al servicio de la ciencia y la sociedad. Sin embargo, el concepto de Geografía por parte de la sociedad es todavía muy desvirtuado. La gente, piensa que la diciplina geográfica una materia tangencial de la Historia (como un hermano indeseado, un apéndice terrible necesario de extirpar) que su única función es para calificarlos en la escuela y tormentarlos con las coordenadas geográficas y nombres de ciudades. Y refererirse al común de las personas es sólo la punta del "icerberg", ya que a nivel profesional, el desconocimiento es tal, que incluso se ha categorizado a la Geografía como una ciencia a nivel de la Alquimia, o la magia negra; un ejemplo concreto fue cuando se presentó el documental de "Ultimate earthquake"de la National Geographic, Donde el Edil de Valparaíso -Sr. Cornejo- catalogó como ficción y carente de rigor científico a un estudio de Marco Cisternas -Geógrafo- auspiciado por la USGS. (por cierto, la USGS se tomaron la palabras de las autoridades y cerraron la oficina, pidiendo disculpas por el hecho tan lamentable y mandando el doble de turistas a Valparaíso).
Otro caso fue el mapocho navegable; Recordado proyecto que llenó de entusiasmo a los Santiaguinos. Transformar la cloaca al aire libre más grande de Chile en el rio Sena Sudamericano. ¿Por qué no se pudo? por culpa de un grupo de Geógrafos (sabiondos) LINK AQUI

Dejando la ironía de lado, es preocupante la situación de la geografía en Chile. Los contenidos de Geografía en el curriculo escolar han disminuido a razón de la modificación de los contenidos en la reforma; tampoco se ha incluido los nuevos paradirgmas geográficos, ni hablar de la PSU.

Los geógrafos en los últimos años, han ocupado cargos en municipalidades, empresas de outsourcing y consultoras especializadas; sin embargo el reconocimiento de las ciencias geográficas es tibio y lento, dependiendo claramente de los equipos multidiciplinarios para un objetivo común. ¿Cúal es la razón?, el desconocimiento por parte de la sociedad de los aportes que genera la ciencia Geográfica.

¿Qué se debe hacer? a los geógrafos de Chile (no me atrevo a generalizar en latinoamérica) les queda un largo camino por recorrer. se logrará algún día el reconocimiento, si por nuestra parte participamos en una mejora contínua de nuestra profesión. ¿Cómo? Estableciendo metodologías concretas; herramientas útiles y atravezando el pantanoso camino desde la proposición de soluciones a ejecutarlas.

Saludos

viernes, noviembre 10, 2006

Territorio fractal

TERRITORIO FRACTAL; NUEVAS PERCEPCIONES DEL TERRITORIO.
Pablo Aranda Chepillo*

Introducción.

El ser humano es espiritual en sus actitudes y se acopla a los ciclos impuestos por fuerzas internas y externas que no domina; como los mercados, que están regulados, a su vez, por la oferta y la demanda, y responden a patrones emocionales más o menos estudiados durante el siglo pasado[1].

El territorio en tanto que depende de ese desarrollo económico y de las actitudes que tienen como reflejo y consecuencia dicha actividad, que otro tipo de seres en este planeta no han desarrollado, tiene como consecuencia una estructuración racional del espacio propio que se materializa en el sentido de la territorialidad. Impulso psicológico plasmado en muchas secuencias de los humanos como es la propiedad y la ordenación del hábitat que con el tiempo se conocerá como civilización y urbanismo. Por este motivo, los criterios de ordenación, la planificación de las infraestructuras de todo tipo, los límites administrativos (fronteras), entrarían en el terreno de la fractalidad social, política, y económica[2]. Es decir, intereses por los que no se rige la Naturaleza, si bien la Humanidad precisa obtener lo esencial del medio natural para tener éxito vital a partir de los elementos esenciales[3]. Ellos son necesarios para la vida y sobre la base de los mismos se ejecuta la acción de planificación. Así, no se puede hablar de un único modelo territorial, sino de tantos como hábitats en los que hubiera enraizado y socio-sistemas que hubiera desarrollado[4]. Desde ese principio básico de la planificación territorial se configuran innumerables métodos y técnicas para intervenir el espacio. Cada una de las civilizaciones en la tierra ha comprendido que la racionalización del espacio es vital para acrecentar exponencialmente los beneficios que conlleva manipular los procesos y vínculos intrínsecos de la espacialización (materialización, configuración espacial) de las sociedades. Así lo hicieron los griegos con un sistema de ciudades-estado; los romanos con un imperialismo fuertemente centralizado e incluso los estados modernos –entre ellos Chile- con normativas generales y específicas de planificación del territorio.

Territorio fractal; conceptos.

La fractalidad del territorio se puede determinar desde la definición de Benoît Mandelbrot[5] en 1975[6], donde define fractal como un objeto geométrico cuya estructura básica se repite a diferentes escalas. Esta propiedad de autosemejanza de los fractales es totalmente reproducible a una definición efectiva de la configuración de un territorio; es decir que la “disposición[7] situacional” se debe a las estructuras básicas tácitas (ADN territorial) que conforman el espacio.

Tales estructuras forman vínculos a distintas escalas -a las que llamaremos flujos- las cuales emanan hasta llegar a la escala geográfica (al nivel de observación de la planificación) donde son identificadas, clasificadas e intervenidas instrumentalmente.

Por cierto; la sociedad también tiene un comportamiento fractal. Inserto en nuestra temática, el desarrollo local desde un instrumento de planificación comunal, el caos que se genera entre las actividades y necesidades (por nombrar algunas atribuciones y funciones de las personas dentro de una comuna) de cada individuo se traslapan y forman cúmulos, los cuales a medida que aumente la entropía de estos (de las atribuciones y necesidades), se manifiestan en el espacio comunal, interviniendo en los flujos y configurando el territorio, sin que aquello sea intencional[8].

Para generar un ordenamiento territorial hay que tener en cuenta el ADN territorial. Esta alegoría con nuestro cuerpo, indica que todas nuestras características y cualidades se manifiestan desde una estructura básica- el ADN- y estas, a su vez, son homologables con la configuración territorial; además se puede inferir que una leve modificación a estas estructuras básicas, desencadena múltiples bifurcaciones y procesos retro-alimentadores en tales estructuras, conllevando a una diferenciación notable de las condiciones iniciales del sistema caótico territorial.

Por ello, es vital lograr determinar las estructuras básicas del territorio (ADN territorial). Desde la perspectiva geográfica, el ADN del territorio es la reciprocidad existente entre individuo y medio[9]. Las condiciones y características que presente tal reciprocidad se traslapará con otras reciprocidades y conformará las características y condiciones que presente el territorio que contiene dichas estructuras.

El ordenamiento territorial, como instrumento interventor del territorio, debe tomar en cuenta dichas estructuras básicas (la reciprocidad entre individuo y medio) para lograr eficazmente los objetivos propuestos en el instrumento.
Se infiere entonces, que el territorio fractal esta configurado por los vínculos existentes entre las estructuras base, las que funcionan como una red neuronal del territorio. Un acercamiento a este racionamiento y a los anteriores realiza Manuel Castells[10]:

“El espacio es la expresión de la sociedad. El espacio no es un reflejo de la sociedad, sino su expresión. En otras palabras, el espacio no es una fotocopia de la sociedad: es la sociedad misma (…) el espacio es un producto material en relación con otros productos materiales -incluida la gente- que participan en relaciones sociales determinadas [históricamente] y que asignan al espacio una forma, una función y un significado social"

Castells deduce que el espacio y la sociedad se conjugan para formar “territorio”, correlativo a los distintos niveles de vínculos entre estructuras básicas. Sobre las relaciones entre las estructuras básicas (la reciprocidad entre individuo y medio) Castells[11] coincide con la investigación al asignar características fractales a los flujos territoriales.

“(…) la hipótesis de que el espacio de los flujos está compuesto por microrredes personales que proyectan sus intereses en macrorredes funcionales por todo el conjunto global de interacciones del espacio de los flujos. Es un fenómeno bien conocido en las redes financieras (…)”

Tales flujos territoriales (ó las macro-redes de Castells) son las proyecciones de los intereses (cúmulos) de las estructuras básicas contenidas en el espacio. Una vez más se reafirma el estado fractal del territorio.

Comprender entonces que los criterios de ordenación y planificación del territorio como una fractalidad social, política, y económica y por ende una fractalidad territorial es establecer normativas, acciones y decisiones de intervención relacionadas al ADN territorial, que en este caso sería el ámbito comunal.

Para ello es de vital importancia observar y decodificar tales reciprocidades, logrando la sintaxis de un modelo fractal del territorio comunal, generando nuevas variables que ahora son invisibles en nuestra realidad sistémica lineal- newtoniana. Si sólo se planteara lo anterior, surgirían innumerables cuestionamientos relativos el “territorio fractal” y a la manera en que este contribuye al desarrollo comunal (inferencia esbozada en este escrito). La planificación en su esencia interviene “nuestra realidad conocida” o mejor dicho, interviene en lo que podemos “abstraer” y “modelar” de la realidad observada. De dicha pericia (empírica y adiestrada por años en los centros de estudio) se genera un modelo de realidad, que es intervenido mediante acciones en la medida que los instrumentos y el financiamiento lo permita. El modelo de realidad está establecido por la constitución política de Chile[12] la cual versa en el establecimiento de un estado unitario constituido por regiones que a su vez se divide en provincias y unidades locales llamadas comunas. Estas últimas se configuran con datos estadísticos que caracterizan la población que la constituye, además de los datos geográficos (clima, geomorfología, hidrografía, entre otros) y socio-culturales-históricos, entre otros datos “cuantificables/cualificables”. Esa es nuestra construcción abstracta del territorio.

Sin embargo, lo que se puede observar de un territorio son los vínculos entre individuo y medio; el ADN territorial. La forma de relacionarse y percibir tal reciprocidad es lo que configura un territorio. Esto rompe toda lógica administrativa, los límites se hacen cada vez más virtuales, donde los intereses (cúmulos) de las estructuras básicas territoriales son los que “fijan” los límites dependiendo de la entropía contenida por dichos vínculos. Un ejemplo de aquello es la relación entre las ciudades de Arica y Tacna (Perú). El vínculo de los intereses de las reciprocidades del ADN territorial son más intensos que con la Capital regional, Iquique, la cual por ley es el centro de gravitación regional (o polo de desarrollo); además de ser el centro urbano más grande de la región de Tarapacá.

El hecho de generar un modelo de territorio sobre la base de datos con índices a nivel nacional es alarmante, sumado a esto, un sistema de planificación homologable a todas las comunas del país es aún más impactante; sobre todo si partimos de la base de que cada sistema territorial es irrepetible e individual, como los seres humanos. El modelo fractal territorial busca esa característica única otorgada por su ADN y pretende, a partir de esa codificación, vislumbrar el entorno y por lo tanto, intervenir el sistema y llevarlo al tan ansiado desarrollo.
Volviendo a la percepción del territorio fractal, la primera impresión es catalogar dicha percepción como una construcción sobre la base de teorías físicas y matemáticas relativamente nuevas. Sin embargo, el investigador Ziley Mora (1995)[13] da cuenta que el territorio fractal ya era comprendido por los mapuche. El proverbio mapuche que encabeza este escrito resume totalmente dicha impresión[14]. Dicho pueblo versó sobre una concepción particular del universo, donde “habitar un cosmos sacralizado e interconectado entre todas sus partículas y planos de realidad”, establece un mundo orgánicamente ensamblado en su variedad de seres por si misma e idéntica hebra energética que “todo lo ha tejido”. Además todas las cosas, acciones, los seres y sus propiedades no son más que interminables réplicas o reproducciones de fenómenos que se están produciendo o se han producido en otro plano del cosmos. “Todas las mismas cosas se repiten en el espinazo de la vida”[15] sentencian los ancianos.

La realidad para los mapuches es esencialmente compleja, reconcentrada, múltiple, insondable en variadas dimensiones y auto-contenida en planos dentro de planos, mundos dentro de un mundo, tal como la metáfora de las cajas chinas.

Es conmovedor el sólo hecho de que la cultura mapuche tenga pericia de temas tan avanzados como ser mirar el mundo desde la segunda ley de la termodinámica, el caos y los fractales. El manejo de conceptos generados de la cultura quántica (que hoy toma más protagonismo en las ciencias occidentales) como las infra-partículas vibratorias, colocando la epistemología mapuche a la cabeza en áreas como los ecosistemas ambientales, y la comprensión de otras dimensiones, como la cuarta –el tiempo- que se curva hacia un atractor extraño –el presente dilatado- pudiendo manipular el entorno mediante tal conocimiento. A tan alto nivel llega la pericia que cronistas españoles y oradores mapuches dan cuenta de aquello, en la cual machis se materializaban en pájaros o proyectaban imágenes móviles de guerreros fantasmas (hologramas)[16] sobre las huestes españolas durante la guerra de Arauco.

El territorio fractal como un sistema en caos.

El sistema territorial es un sistema no lineal, por lo tanto es caótico. Las estructuras básicas territoriales interactúan subyacentemente manifestándose en acontecimientos supuestamente aleatorios[17]. Esta aleteoridad de los sucesos territoriales genera incertidumbre por los innumerables posibles escenarios de desarrollo, siendo esta lidiada por los planificadores a la hora de intervenir con los PLADECO. Para eliminar la incertidumbre en la planificación, el territorio comunal tendría que estar en condiciones de laboratorio, donde se puedan controlar las variables y obtener los objetivos deseados. Sin embargo, las condiciones de las variables no son de laboratorio y a pesar de los avances de la ciencia newtoniana, no se ha logrado erradicar la incertidumbre a la hora de planificar ni en nuestras vidas. La teoría del caos versa que la incertidumbre es un fenómeno que acompaña toda la vida a los humanos y que es imposible combatirla. Imagínese el sólo hecho de poder visualizar la evolución de una comuna desde sus condiciones iniciales. No habría necesidad de planificar –desde la actual metodología y punto de vista, por cierto- sólo se interviene para situaciones que se considerarían deficientes y críticas, además de maximizar los recursos de forma óptima. Empero, la incertidumbre es un fenómeno detestable, que se manifiesta a cada momento incluso antes de la muerte.

De los innumerables textos de planificación versan sobre la generación de procesos para la reducción de las incertidumbres para el desarrollo comunal[18]. Dichos procesos establecen que la selección de variables y su posterior análisis en la acción de planificar, reduciría las incertidumbres generadas por las innumerables bifurcaciones y procesos retro-alimentadores del sistema territorial, aunque el sólo hecho de que existan, hace impredecible a dicho sistema; es decir, no tenemos el control. La teoría del caos establece que es imposible tener el control de todo lo que pasa en el territorio, ya que este constantemente cambia, imposibilitando alguna manipulación o predicción del mismo. Para ello, se debe dejar de resistir a estos cambios –incertidumbres- y aceptar la impredecibilidad del sistema caótico en la naturaleza y en cada una de nuestras vidas. Al aceptar la incertidumbre –el caos- como algo inherente del territorio a planificar, aflora la creatividad de cada planificador para lograr los diversos estados de desarrollo tan deseados por todos, sin que esto se confunda con decisiones apresuradas o improvisadas para la planificación del territorio comunal. Cuando el control insistente desaparece y la creatividad fluye, aparece la mariposa de Lorenz. Percibir los pequeños detalles territoriales (las micro-estructuras de Castells, o las estructuras básicas de este escrito) vislumbramos que pequeños cambios tienen una gran resonancia en el sistema. Por ello se debe tomar atención a lo que no se puede modelar ni describir con las actuales metodologías geográficas –el ADN territorial- que mediante cambios sutiles provoque grandes cambios territoriales y de mayor impacto que un cambio revolucionario[19], drástico.

De lo anterior se puede inferir que generar un plan de desarrollo comunal, primero se debe aceptar la incertidumbre del devenir local, incentivar la creatividad de la comunidad y lograr el desarrollo mediante la intervención sutil del ADN territorial.

Aceptar que el sistema territorial es un sistema caótico, es afirmar que todo esta relacionado con todo; que alguna intervención, por insignificante que sea, puede aumentar la entropía del sistema generando las ya mencionadas bifurcaciones y rizos retro-alimentadores, cambiando constantemente las condiciones iniciales del sistema, echando por tierra el concepto de que las realidades son lineales y absolutas, ya que el futuro no es uno sino son tantos como el número de decisiones que se tomen desde el presente (desde el multiverso).

En resumen, el sistema territorial es el producto de los cúmulos de relaciones existentes entre individuo y medio –el ADN territorial- donde dichas relaciones son complejas y caóticas; ya que dicho sistema presenta características de autosemejanza en las estructuras básicas del territorio, las infinidades de relaciones existentes tienen la capacidad de auto-organizarse, y tienen un comportamiento estocástico, al ser sensibles a las condiciones iniciales.

Entonces, para la nueva perspectiva de la planificación comunal, las estructuras básicas territoriales serían el eje para abordar los distintos escenarios de desarrollo en la comuna; sin embargo, no se puede dejar de lado el desarrollo económico, pilar fundamental de los procesos de planificación que se ejecutan en la actualidad, que en otra ocación analizaremos.

* Licenciado en Geografía; Geógrafo (2006) PUCV.
[1] Lugaresaresti Joseba; “Sistemas Fractales, Caos y Holística en el Análisis Territorial: La Geografía”. Instituto De Geografía, Universidad De Barcelona (2004). Http://www.Livingstone-Globe.com
[2] Ídem.
[3] Aire, agua y suelo, más el catalizador fuego. (Nota de autor)
[4] La base del éxito ecológico de los humanos es su inteligencia y su capacidad de intervenir su entorno y el modo de plasmarla sobre el territorio se denominará urbanismo.(Nota del autor)
[5] “La geometría tradicional ha determinad que los objetos regulares poseen una dimensión entera; en la actualidad la geometría fractal puede aproximarnos a la determinación de dimensiones físicas efectivas, pudiendo adquirir valores fraccionarios.” Mandelbrot, Benoit (1984); The fractal geometry of nature. San Francisco, Estados Unidos (la geometría fractal de la naturaleza).
[6] Ver página 22, Capítulo dos del texto.
[7] Configuración territorial, redundancia gramatical.
[8] El común de la gente no percibe que todo lo que hace y no hace, tiene ingerencia notable en la configuración de su entorno. A esto se le denomina las sutilezas del caos. (nota del autor)
[9] Esencia de la ciencia geográfica. (nota del autor)
[10] Castells, Manuel; “El surgimiento de la sociedad de redes”, capítulo 6 el espacio de los flujos, http://www.hipersociologia.org.ar/catedra/material/Castellscap6
[11] Ídem.
[12] Se remite al tema de investigación.
[13] Mora, Ziley (1995). “La antigua visión indígena de la naturaleza como energía inspiradora en la fundación de una ética del ambiente”, Temuco, Chile.
[14] “Ngelay katrüdüngüalu” No hay nadie quién ataje el desorden. En la percepción ambiental mapuche de la segunda ley de la termodinámica. (nota del autor).
[15] Mora, Ziley (1995). “La antigua visión indígena de la naturaleza como energía inspiradora en la fundación de una ética del ambiente”, Temuco, Chile.
[16] Mora, Ziley (1995). “La antigua visión indígena de la naturaleza como energía inspiradora en la fundación de una ética del ambiente”, Temuco, Chile.
[17] Ver página 20 Capítulo dos del escrito.
[18] Ya que el plan (planificación) es la permanente y eterna angustia del hombre frente al mañana. Allesh, Rodolfo (1993). GEO442-00 Teoría de la Planificación. Instituto de Geografía PUCV.
[19] Este concepto se origina desde las ciencias exactas, según Cohen (1989) “el concepto de revolución surgió desde las ciencias (astronomía y geometría) y luego pasó al discurso de la transformación política y social, donde sufrió una importante modificación inicial (…) el concepto cambiante de la revolución volvió a las ciencias sociales (…) a los estudios sobre cambios científicos. Cita extraída de:
Buzai, Gustavo (1999); Geografía global, Lugar editorial, Buenos Aires Argentina.

Para citar: EVAPLADECO: Nuevos Escenarios de Planificación. PUCV 2006.

sábado, agosto 05, 2006

Región del Aconcagua.

REGIÓN DEL ACONCAGUA: Una de las nuevas regiones del país.


hace poco unos de los temas de discución entre porteños y aconcagüinos no es cómo distribuir las inversiones públicas en la región; sino la aparente independencia de la "Quinta región interior" (denominación desde Valparaíso al territorio Aconcagüino) a el funcionamiento, actividades y problemas de la Quinta región (denominación desde Santiago al gran Valparaíso).

Si bien, no hay que ser un genio para notar la disfuncionalidad de las medidas (y las estrategias) provenientes desde el gobierno regional hacia los intereses del valle del Aconcagua. Sin embargo, se discute el hecho que si es razonable que exista una sola administración, que guie en una sola estrategia regional a dos territorios diferentes con intereses distintos.

domingo, junio 25, 2006

Hacia las Nuevas Geografías



Preliminar:

"El dominio geográfico parece gigantesco igualmente
porque la geografía no puede, en definitiva,
definirse ni por su objeto ni por sus métodos,
sino más bien por su punto de vista" (01)


Sin duda, los geógrafos del siglo XXI siguen el la exploración del mundo. Si bien, no busca nuevos territorios como en el siglo XVI, la exploración está abarcando áreas de la ciencia nunca antes visto por la disciplina geográfica. El encuentro de la geografía con los nuevos paradigmas de la ciencia, genera nuevos cuerpos de conocimiento; retro-alimentando y redefiniendo conceptos y nociones que son propios a la ciencia geográfica.

Enfrentado ante estos nuevos modelos, durante una investigación sobre PLADECO, Sistemas complejos, Caos y la dimensión Holística fueron los conceptos que se repetían y que no lograba decantar; ¿Cómo asimilar dichos conceptos –y otros- a la geografía? ¿Por qué tomar conceptos ajenos a la geografía? Y si el marco conceptual la investigación se generaba sobre la base de dichos conceptos ¿Qué resultado arrojará dicha investigación?; Además de la duda principal ¿Qué tiene que ver los sistemas complejos, el caos y holística –entre otros conceptos- con la planificación, con el PLADECO?

Cuestionado –no sólo por mí- sino que también mis cercanos tenían serias dudas sobre el “éxito” de la investigación. Pero a pesar de todo pude realizar y llegar a materializar el estudio. De ella se generó dos conceptos (que a medida “avance” el (espacio)tiempo publicaré en este blog.) el territorio fractal (02) y la planificación caótica.(03)


A futuro, este blog mostrará artículos sobre caos y complejidad en geografía, además de discutir temas relacionados entre dichos conceptos y la disciplina geográfica.
______________________________
(01) Jean Dresch: artículo Géographie, en Encyclopedia Universalis, París, (escrito en 1971), citado por Alain Reynaud en “El Mito De La Unidad De La Geografía”, revista Geocrítica, Barcelona (1976).
(02) (03) Publicado en "Evapladeco: Nuevos escenarios de planificación" Valparaíso 1 Julio 2006.